Por medio del decreto 627, publicado hoy en Boletín Oficial, el gobierno dio marcha atrás y derogó los decretos rechazados por el poder legislativo. Entre ellos, el 345, que establecía una reforma estructural de la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (CONABIP) y eliminaba la autonomía institucional y financiera, transfiriendo sus funciones a la órbita directa de la Secretaría de Cultura.
“Estamos muy contentos de que finalmente se haya derogado el decreto tanto en Diputados como Senadores. Creemos que es un logro colectivo de todos los que hicimos mucho esfuerzo, trabajo, y de todo el país”, dijo a Señalador Guadalupe Meroño de la Biblioteca Popular de Carlos Keen, Luján, que integra “Bibliotecas Populares en Lucha”, una agrupación que se formó luchando contra la Ley Bases y ante la falta de acción de las federaciones.
Las más de 1500 bibliotecas populares del país vienen denunciando la inconstitucionalidad del decreto publicado en el Boletín Oficial el 22 de mayo y, durante todo este tiempo, exigieron al Congreso de la Nación su rechazo, y a la Justicia Federal una medida cautelar para ponerle freno.
“Desde Bibliotecas Populares en Lucha dimos una batalla para la cual nos preparamos, hicimos reuniones, primero en Diputados, con todos los diputados que nos dieron una entrevista, y después también con algunos senadores, para manifestarles nuestra argumentación sobre por qué tenía que caer ese decreto 345 del 2025, que lo que hacía era degradar la Conabip hasta convertirla en una dirección simple de la Secretaría de Cultura, cuando hoy es un organismo autárquico, que gestiona sus propios fondos”, añadió Meroño.
En tanto, sobre la degradación que producía el decreto, la referente cultural explicó que la Secretaría de Cultura se quedaba con los fondos y cambiaba la estructura, quitándole el carácter de ‘Comisión’ de bibliotecas populares, y convirtiéndola en una dirección que tenía un comité asesor pero que ya no tenía esa junta representativa a nivel federal que debería tener en la actualidad.
“Lo que resta ahora es seguir en pie de lucha porque sabemos que esto no termina acá. Si bien ya con la derogación del decreto de hoy la CONABIP se retrotrae a la situación previa, intuimos que puede haber otros ataques por otro lado”, advirtió la integrante de Bibliotecas Populares en Lucha.
Y concluyó: “Hoy lo que estamos pidiendo es que la CONABIP cumpla con el reglamento de la ley 23.351. Y, por otro lado, sabemos que las federaciones de las provincias, que nos representan, muchas de ellas están muy inactivas. Sería un momento importantísimo para que tomen cartas en el asunto y empiecen a interactuar con la CONABIP para defender a las bibliotecas y podamos obtener los fondos, porque este año todavía la mayoría de las bibliotecas no recibimos el apoyo de la CONABIP para gastos corrientes que se recibe todos los años”.
La CONABIP fue creada en 1870, hace 155 años, por iniciativa del presidente Domingo F. Sarmiento, mediante la Ley Nº 419, y consolidada a lo largo de los siglos XX y XXI como estructura estatal para garantizar el acceso federal y democrático a la lectura y la cultura. La Ley 23.351 de 1986 institucionalizó un modelo de gestión asociativa entre el Estado y las bibliotecas populares como organizaciones de la sociedad civil. Fue un modelo pionero, y actualmente más de 1.500 bibliotecas en todo el país integran este sistema, alcanzando a más de 4 millones de personas con el trabajo de más de 30.000 voluntarios.
